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Por qué son buenos los probióticos para los perros

Por qué son buenos los probióticos para los perros

Mantener una flora intestinal sana es fundamental para garantizar la salud y el bienestar de nuestros amigos peludos. Esto se debe a la función protectora realizada por una serie de bacterias beneficiosas conocidas como probióticos. Si todavía no has oído hablar de estos microorganismos, sigue leyendo.

En el artículo de hoy te contamos qué son y cuáles son los beneficios de los probióticos para los perros.

Probióticos para perros: ¿qué son y qué beneficios aportan?

En el cuerpo de los perros habitan miles de bacterias diferentes que forman parte de lo que se conoce como flora microbiana. Más del 90% de este ecosistema microbiótico vive en el tracto gastrointestinal, donde intervienen en diferentes procesos como la digestión y la protección inmunológica.

Podemos decir que los probióticos son microorganismos intestinales que impiden el crecimiento y la proliferación de las bacterias perjudiciales. Entre sus múltiples beneficios, podemos destacar las siguientes funciones:

  • Participan en la fermentación de los alimentos y la absorción de los nutrientes que se lleva a cabo durante la digestión.
  • Ayudan a regular y reforzar el sistema inmunológico.
  • Actúan como barrera de defensa natural frente a los microorganismos patógenos.
  • Contribuyen al equilibrio y el mantenimiento de la mucosa intestinal.

¿Cuándo debemos administrar probióticos a nuestras mascotas?

Cuando las bacterias beneficiosas se debilitan o disminuyen, otras bacterias conocidas como oportunistas, que están presentes de manera habitual en el intestino, aprovechan para reproducirse y convertirse en bacterias perjudiciales.

En estos casos, es especialmente recomendable reforzar y regenerar la flora intestinal de nuestro perro ofreciéndole un suplemento de probióticos:

  • Después de un tratamiento veterinario a base de antibióticos.
  • Durante el transcurso de enfermedades del tracto digestivo, como la diarrea o la gastroenteritis.
  • En los procesos de transición y cambio de dieta entre dos tipos de comida.
  • En la prevención y el control de infecciones y reacciones alérgicas.

¿Qué microorganismos probióticos son aptos para los perros?

No todos los probióticos que son aptos para las personas son beneficiosos para nuestros amigos peludos. Hasta el momento, se ha demostrado que las siguientes cepas de bacterias y levaduras son eficaces y seguras para los perros:

  • Enterococcus faecium.
  • Lactobacillus acidophilus.
  • Lactobacillus casei.
  • Lactobacillus plantarum.
  • Bifidobacterium bifidum.
  • Bifidobacterium animalis.

¿Cómo incorporar los probióticos en la dieta de nuestros amigos peludos?

Una manera sencilla y saludable de incorporar probióticos en la dieta de nuestras mascotas es mediante algunos productos lácteos obtenidos a través de la fermentación, como el kéfir y el yogur. En ambos casos, es preferible que estén hechos con leche de cabra, pues así serán más digeribles para nuestros compañeros cuadrúpedos.

Otra forma de ofrecer microorganismos probióticos a los perros es añadiendo chucrut a sus comidas. Se trata de un producto vegetal a base de col fermentada, muy rico en bacterias lácticas y propiedades probióticas. Los probióticos para perros se pueden administrar por separado o incorporarse como complemento en la alimentación habitual. La dosis recomendada es de una cucharada sopera por cada 10 kg de peso y cada dos días. Esta cantidad es aproximada y puede variar en función de las características específicas de cada ejemplar.

Por eso, recomendamos empezar por cantidades más pequeñas para comprobar la tolerancia e interrumpir el tratamiento en caso de observar cualquier reacción adversa. La mejor manera de introducir los probióticos en la dieta de tu mascota es a través de su pienso diario.

Y es que hoy en día podemos encontrar numerosas opciones de comida para perros enriquecida con probióticos para promover y regular el desarrollo de la flora intestinal.

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